CONCLUSIONES

Podemos concluir que las temperaturas elevadas del verano, por encima de los 30ºC y las bajas precipitaciones son un factor determinante en el aumento del número de mosquitos flebotomos y por tanto del número de casos de Leishmaniosis.
En un futuro no muy lejano las temperaturas máximas y mínimas aumentarán, las precipitaciones disminuirán y todo esto provocará un aumento exponencial del número de mosquitos que no solo provocarán enfermedades como la Leishmaniosis, también aumentarán otras enfermedades hasta ahora denominadas tropicales.
La creación de trampas económicas y solares permitirá un mayor control y estudio de insectos vectores, ayudará a la disminución de casos y a la protección de las personas y animales contra la propagación de enfermedades transmitidas por mosquitos.

Es muy importante que la gente conozca la peligrosidad de este pequeño mosquito para nuestras mascotas y para las personas, y cómo podríamos controlarlo en un futuro.